Hace unos meses el PSOE nos sorprendía con otra de sus maravillosas grandilocuencias. En su querer avanzar en esa laicidad constitucional de la que tanto hablan y enarbolan continuamente, planean quitar, de la vida pública y social, LOS CRUCIFIJOS, SÍMBOLOS Y LITURGIAS RELIGIOSAS.
Me pregunto yo, que, a estas alturas de la película, cuál puede ser el mal que un crucifijo pueda hacer en la moral de la persona. Creo que es algo que cae por su propio peso. Ya no nos van a dejar ser libres para sentir y creer. Ya no nos van a dejar ser libres para defender nuestras creencias…no, nos quieren quitar esa libertad. Pero ahora, con nuestra recién Semana Santa todavía pululando por nuestras ca-lles, compruebo, con estupor, cómo “por la boca muere el pez”.
SÍ, porque yo creía que este año, después de tantos di-mes y diretes relacionados con los símbolos religiosos, nuestros mandatarios políticos locales no realizarían ningún acto- no de fe, si no social- acompañando a ninguna de las procesiones que han abanderado nuestra Semana de Pasión y, por ende, el sentir popular.
Pero no. Ahí han estado. Desde el primero hasta el último. Desde el más mayor hasta el más joven; desde la procesión más temprana hasta la más tardía. Desde el primer hasta el último día. Algo increíble si tenemos en cuenta que el gobierno de ZP esgrimió aquello de que “el mandato constitucional de aconfesionalidad exige esa retirada de símbolos para apoyar la reforma de la Ley Orgánica de Libertad Religiosa”.
Pues muy bien, señores del PSOE. Sigan ustedes adelan-te con sus miedos y prejuicios. Sigan ustedes adelante con sus ideales. Sigan ustedes adelante con esa forma de ver la vida. Sigan ustedes adelante con sus reformas, sigan adelante con todas y cada una de las novedades que se les vayan ocurriendo…pero sean consecuentes con las mismas.
Consecuentes, sí. Porque de nada sirve que entablen esa polémica, que se les llene la boca de semejantes barbaridades, de miedos, temores y ridiculeces, si lue-go, a la postre, llegan las procesiones lideradas, eviden-temente, por las cruces de guía, por los pasos de un Cristo que murió por la salvación de nuestras almas…y nos encontramos detrás a quien desprecia y renuncia a los símbolos religiosos. Juzguen ustedes.
PD. EL AÑO QUE VIENE ¿NOS CAMBIARÁN YA EL NOMBRE DE VACACIONES DE SEMANA SANTA POR VACIONES DE SEMANA DE PRIMAVERA
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